jueves, 19 de octubre de 2017

La promesa de la isla. Poesía como exilio. De Arturo Borra



Ayer en la Librería Bartleby de Ruzafa tuvo lugar la presentación del nuevo libro de Arturo Borra, Poesía como exilio. En los límites de la comunicación (Prensas Universitarias de Zaragoza, 2017), un ensayo que se centra en la exploración de una serie de escrituras poéticas contemporáneas, un estudio de textos poéticos sin intención de formar escuela, con vocación clandestina. Textos que están construyendo un lugar fuera de los textos canonizados y abren una línea de fuga.

La promesa es la isla

“El exilio como un lugar de la poesía, como un mundo en camino de la deshumanización programada”

Presentado por Antonio Méndez Rubio, el cual al comienzo de su intervención apuntó que en este volumen encontramos varias aristas, tal vez la poesía como desierto que transitar, el camino a la isla desierta, para pasar a cuestionarle la siguiente pregunta; ¿Desde donde lees el poema, a riesgo de encontrarte con el exilio fuera de lugar? A lo que Borra argumentó su respuesta desde varios puntos, aduciendo a que este no es un volumen que hable de poetas exiliados ni migrantes, no es una antología de autores que por condiciones políticas, personales o sociales, han tenido que partir de su lugar de origen para desarrollar su poética, sino que lo que intenta retratar, siempre desde una lectura personal, es como unos cuantos textos sin formar ningún tipo de escuela se desarrollan, qué es lo que nos plantean y desde que lugar de enunciación se están expresando.


Para ilustrar, Arturo Borra recurrió al ejemplo de Chatal Maillard, autora recogida en el volumen, y su obra Husos estructurada como prosa, pero que mezcla registros entre el ensayo y el verso, produciendo una mirada descolocada, siendo el poeta participe de este desconcierto, ¿Cual es el huso del observador?, creando así una conversación entre géneros y un esfuerzo en su lectura, partiendo de un lugar que se fuga de nuestros discursos cotidianos y pone en crisis el presente.

A.M.R ¿Cómo sabemos si es un desplazamiento crítico o una fuga en sentido de caída de brazos, si este exilio puede ser productivo o evasivo?


   A.B La condición de la crítica es el distanciamiento, el exilio y atravesar la experiencia de la lectura, plantear cuestiones desde otro lugar, la comunicación. Recurriendo a citas como "Hay cosas de las que no queremos saber absolutamente nada", Borra nos plantea que los textos a veces dicen mucho más de lo que los autores quieren decir y aboga por una recuperación de las vanguardias, ya que  todas ellas buscaban conexionar el arte con la vida, pero pasando por un espíritu crítico, ese espíritu de Arte/vida.



La tarde continuó con la intervención de varios de los espectadores, incurriendo en un diálogo fluido sobre la mercantilización del arte y por la tanto de la poesía, el valor del los nuevos movimientos poéticos de las grandes editoriales y su capacidad de comunicación y reflexión, más allá del mero entretenimiento, la oscuridad de los textos encapsulados, el dadaísmo y la cuestión del sujeto como individuo libre ante la masa que todos y cada uno denominamos "gente".

Pensemos pues en éste como el estudio de una escritura resistente a plegarse a las formas convenidas, abriendo, tal vez, otras vías de pensamiento, líneas de luz en la oscuridad.

Jorge Ortiz Robla



No hay comentarios:

Publicar un comentario